<Cabra montés o salvaje>
SU CARĂCTER:
Decidida y valiente, aprovechĂł la oportunidad que se presentĂł para matar a un enemigo del pueblo de Dios.
SU GOZO:
Haber sido elogiada por Débora y Barac por la parte que desempeño en una victoria decisiva.
ESCRITURAS CLAVES:
Jueces 4-5
LA PROMESA QUE RECIBE
Subyacente a la historia de Jael y la muerte de SĂsara hay un Dios que ha prometido nunca olvidar a su pueblo y que se mantiene fiel a dicha promesa. Cuando la esperanza se nos desvanece y la perspectiva de una victoria se ve como casi imposible, Dios estĂĄ obrando para llevar a cabo su plan.
El pueblo de Israel durante la Ă©poca de los jueces debe haber llevado a Dios al borde de la exasperaciĂłn a causa de su vacilaciĂłn continua. Cuando los tiempos eran buenos, fĂĄcilmente se olvidaban de Dios y seguĂan sus propios caminos. Pero apenas los tiempos se volvĂan difĂciles, corrĂan a Ă©l en busca de liberaciĂłn.
¿Le suena conocido? La historia de vacilaciĂłn del pueblo de Dios continua aun hoy. Con suma facilidad avanzamos a solas, pensando que podemos manejarlo todo, hasta que nos topamos con algo que nos resulta demasiado difĂcil. Solo entonces corremos hacia Dios por ayuda.
Sin embargo, ¡quĂ© asombroso es Dios! Siempre estĂĄ presente. Siempre estĂĄ dispuesto a rescatarnos cuando clamamos a Ă©l. Siempre estĂĄ dispuesto a perdonar.
PROMESAS EN LAS ESCRITURAS PARA TI
28 »No obstante, apenas tenĂan paz, volvĂan a cometer maldades ante tus ojos, y una vez mĂĄs permitiste que sus enemigos los conquistaran. Sin embargo, cada vez que tu pueblo volvĂa y nuevamente clamaba a ti por ayuda, desde el cielo tĂș lo escuchabas una vez mĂĄs. En tu maravillosa misericordia, los rescataste muchas veces.
-NEHEMĂAS 9:28
1 Te amo, Señor; tĂș eres mi fuerza.
3 Clamé al Señor, quien es digno de alabanza,
y me salvĂł de mis enemigos.
-SALMOS 18:1, 3
8 Amados hermanos, pensamos que tienen que estar al tanto de las dificultades que hemos atravesado en la provincia de Asia. Fuimos oprimidos y agobiados mĂĄs allĂĄ de nuestra capacidad de aguantar y hasta pensamos que no saldrĂamos con vida. 9 De hecho, esperĂĄbamos morir; pero, como resultado, dejamos de confiar en nosotros mismos y aprendimos a confiar solo en Dios, quien resucita a los muertos. 10 Efectivamente Ă©l nos rescatĂł del peligro mortal y volverĂĄ a hacerlo de nuevo. Hemos depositado nuestra confianza en Dios, y Ă©l seguirĂĄ rescatĂĄndonos, 11 y ustedes nos estĂĄn ayudando al orar por nosotros. Entonces mucha gente darĂĄ gracias porque Dios contestĂł bondadosamente tantas oraciones por nuestra seguridad.
-2 CORINTIOS 1:8-11
REFLEXIĂN
Puede que pensemos en los pensamientos y los actos de Jael y nos preguntemos quĂ© dice Dios por medio de ella. Pero cuando miramos el cuadro general, podemos estar seguras de que Dios tenĂa el control, protegiendo a su pueblo. Fuera Jael una israelita que se casĂł con un incrĂ©dulo o fuera una extraña para Dios, se convirtiĂł en parte del Plan de Ăl.
Al igual que Dios actuĂł para el bien de Israel en el Antiguo testamento, lo hace tambiĂ©n por nosotras en la actualidad. A pesar de lo ajena o peligrosa que sea nuestra posiciĂłn, podemos estar seguras de que Dios no nos deja. Cuando le obedecemos, Ăl puede utilizar incluso a una Jael para traer bendiciĂłn a nuestra vida. Siempre y cuando confiemos por completo en manos de Ăl, estamos seguras.
Glorifique a Dios porque Ă©l venciĂł a los enemigos de nuestra alma y porque podemos ser instrumentos de liberaciĂłn para otros por medio de su EspĂritu Santo. Confiesele cualquier tendencia a la pasividad que tenga en la lucha contra el pecado y SatanĂĄs y pĂdale que le dĂ© sabidurĂa y discernimiento para la batalla espiritual.
Para ver su vĂdeo→
❤️
ResponderEliminar