Gómer - Mujer de la Biblia

SU NOMBRE SIGNIFICA

«Consumación»

SU CARÁCTER:
A pesar de ser una mujer casada, mantenía numerosas aventuras románticas, y les atribuía a sus amantes los regalos que le había hecho su marido.

SU DOLOR:
Haberse convertido en el símbolo del adulterio espiritual: una representación de la infidelidad de Israel hacia Dios.

SU GOZO:
Que su marido continuara amándola a pesar de sus infidelidades.

ESCRITURAS CLAVE: Oseas 1–3

LA PROMESA QUE RECIBE

Se trata de un matrimonio tempestuoso. De una esposa que no se decide a serle fiel al marido que la ama. De un marido que no solo se mantiene fiel, sino que sigue amando. De hijos cuya paternidad es dudosa. Todos esos son elementos no de una telenovela sino de un hermoso cuadro de lo que es el amor y la fidelidad de Dios hacia su pueblo, a menudo desamorado e infiel. Las promesas que se enumeran en cuanto a la vida de Gómer se aplican no solo al pueblo de Israel sino al pueblo del Señor hoy. Dios nos ama y se mantiene fiel a nosotros. Aun cuando lo abandonemos y nos alejemos, él nos espera con los brazos abiertos. Solo pide de nosotros arrepentimiento para que sus bendiciones vuelvan a fluir en abundancia.

PROMESAS EN LAS ESCRITURAS PARA TI

⁷ Les daré un corazón que me reconozca como el Señor. Ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios, porque se volverán a mí de todo corazón.

-JEREMÍAS 24:7

³ ¡Oh, si conociéramos al Señor!

    Esforcémonos por conocerlo.

Él nos responderá, tan cierto como viene el amanecer

    o llegan las lluvias a comienzos de la primavera».

-OSEAS 6:3

¹⁹ Ahora pues, arrepiéntanse de sus pecados y vuelvan a Dios para que sus pecados sean borrados.

-HECHOS 3:19

REFLEXIÓN

No podemos saber si Gómer agradeció la compasión de su esposo. Israel no se arrepintió de inmediato, y quizá Gómer tampoco lo hiciera; pero su caída y su restitución dan a los cristianos en la actualidad un claro retrato de lo mucho que Dios ama a su pueblo pecador y hasta qué extremos irá Él para reclamar el amor de su pueblo. Él no guarda rencores, sino que llama al pecador a dar un giro radical y regresar a Él otra vez.

¿Le has fallado a Dios? Él nunca te fallará. Vuélvete en arrepentimiento, y acércate a Aquel que nunca decepciona a sus amados. A pesar de lo que hayas hecho, Él ofrece perdón. Solamente pide, pues Él te ha estado esperando todo el tiempo.

Dele gracias a Dios por su misericordia y porque Dios te amó aun antes de que usted pensara en amarlo. Confiesele cualquier tendencia a amar el dinero, los placeres, a sus hijos, a su marido o a su carrera más de lo que lo ama a él. Pídale a Dios que aumente sus ansias de conocerlo de manera más íntima.

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